- May 29, 2025
- Updated 9:07 pm
Susana Sánchez Segura
¿Sabían que la tecnología genética desempeña un papel clave en el avance del diagnóstico y tratamiento de enfermedades?, pues si, ya que permite diagnósticos más rápidos, precisos y personalizados. Según datos de Grand View Research, el mercado de diagnóstico molecular en el país alcanzará los 226 millones de dólares para 2030, con una tasa de crecimiento anual del 2.6% entre 2025 y 2030.
Adriana Vega, gerente de producto en QIAGEN, multinacional alemana especializada en diagnósticos moleculares, asegura que las herramientas de biología molecular tienen una amplia aplicación en áreas como oncología, enfermedades infecciosas, enfermedades raras y salud reproductiva, porque contribuyen no solo a la detección de enfermedades, sino también a la comprensión de sus orígenes genéticos, lo que hace posible los tratamientos personalizados.
Sin embargo, a pesar de los avances significativos, el conocimiento completo del genoma de la población mexicana aún enfrenta desafíos, especialmente en lo que respecta al mapeo genético adecuado.
Por eso, las empresas están actuando de forma estratégica en este escenario, con soluciones que hacen el diagnóstico molecular más preciso y eficiente. Tecnologías como la PCR digital, la bioinformática avanzada y la automatización de procesos fortalecen la medicina de precisión y permiten a los profesionales de la salud tomar decisiones más acertadas.
QIAGEN, por ejemplo, ofrece herramientas como QIAcuity, que detecta mutaciones con ultra sensibilidad, y la plataforma QIAstat-Dx, que permite el diagnóstico molecular rápido de enfermedades infecciosas; además de inversiones en formación científica a través de seminarios y talleres dirigidos a la capacitación de profesionales del área.
Seguimos avanzando en este tema, pero aún es necesario ampliar la concienciación sobre el papel del ADN y de las pruebas genéticas en la prevención de enfermedades. Muchas personas asocian estos exámenes únicamente con condiciones graves, sin reconocer su relevancia para la medicina preventiva.
Para Adriana, es fundamental mostrar que el uso de la genética no se limita al diagnóstico de enfermedades raras o cáncer, sino que puede mejorar la salud de toda la población al anticipar riesgos y orientar decisiones más asertivas.
Ya que la creciente demanda de pruebas genéticas en México responde a factores como el mayor acceso a tecnologías moleculares, el interés en la medicina personalizada, los avances en programas de cribado genético y el aumento de enfermedades crónicas.
La inclusión de la genética en los programas de salud pública y privada también impulsa este movimiento, consolidándose como una herramienta esencial en la transformación de la medicina en el país. La medicina personalizada, basada en pruebas genéticas, tiene el potencial de elevar la calidad de la atención médica al ofrecer un enfoque más individualizado para el tratamiento de diversas condiciones de salud. Interesante conclusión para tomar en cuenta que la prevención usando la genética y las pruebas moleculares pueden en algún momento salvar la vida.